Fresnillo.- Debido a las obras de modernización de calles que se llevan a cabo en el centro, la afluencia de clientes a los bares bajó y tienen pérdidas.

Los entrevistados destacaron que intentan mantener abiertos los negocios; sin embargo es complicado porque deben pagar rentas, insumos, proveedores y demás, que complica el panorama para obtener ganancias.

Ante esta problemática, los propietarios de bares y cantinas de la demarcación solicitaron al Municipio que agilice el proceso en las obras.

Aunque enfrentan una condición difícil en los negocios de bebidas alcohólicas, los propietarios descartaron el cierre de los establecimientos, pues reconocieron que es la única forma de subsistir que tienen.

Pablo González, encargado de un bar, detalló que la baja en las ventas se presentó debido a que los clientes no tienen accesos fáciles a los establecimientos y además al estacionarse todo se complica para encontrar un lugar.

“Uno quisiera que se mantuvieran las cosas, que existan los clientes igual que antes, pero eso ya no se presenta entre tanta tierra, polvo y desastre”, argumentó.

Armando Pereira, otro empleado de un bar, explicó que antes llegaban desde temprano personas a consumir una o dos cervezas, actualmente si un cliente acude llega hasta en la noche o piensa doble vez para acudir.

“Nosotros ya no sabemos ni que estrategias aplicar, ni modo que uno venda más barato cuando enfrentamos el incremento en diversos productos y demás servicios”, precisó.