Por: Juan Miguel Hernández
TIJUANA.- Después de 36 años cierra sus puertas un bar icónico de la ciudad, espacio que a lo largo de mucho tiempo, albergó hechos y anécdotas que lo harán un lugar inolvidable.
El propietario del bar, Rubén Espinoza, comentó que el cierre se debe a que el terreno donde se encontraban ubicados, es rentado y el dueño les solicitó lo dejaran para emprender otros planes dentro del predio.
Dijo que Ruben Hood, guardaba un encanto especial que a lo largo de los años lo hizo ser muy apreciado entre sus clientes.
“Tantas reuniones, tanta gente que lo conoció, negocios que se hicieron aquí, inclusive hasta personas que ya están casadas y que aquí fueron sus primeras citas, había un grupo de trío hace muchos años y pues anécdotas muy bonitas como las posadas cada año y las bebidas cortesía de la casa, por un año de patrocinio”, expresó.
Durante mucho tiempo pasaron momentos difíciles, y uno de ellos fue aquel 21 enero de 2004, donde fue asesinado el subprocurador de justicia del estado de aquella época, pero eso, no fue impedimento para mantenerse 10 años más funcionando.
“La gente creyó en nosotros para seguir otorgando la seguridad, pasamos por unos meses muy difíciles, de tanto que a los meses, falleció mi papá de tristeza, nostalgia, de que todo lo que se construyó, sí se vino abajo unos meses, pero el lugar resurgió tiempo después gracias a la respuesta de la ciudadanía”, concluyó.