El antro Los Tres García, donde el pasado fin de semana se escenificó un hecho violento, se encuentra cerrado mientras se lleva a cabo la investigación, después de la cual se podría deliberar a favor del propietario si se determina que el encargado o personal del negocio estuvo ajeno a los hechos.

Lo anterior lo dio a conocer ayer el titular de Gobernación en esta frontera, Ángel Olivas Rico, quien señaló que la obligación de todo dueño de establecimiento dedicado a la venta de bebidas embriagantes, es la de proteger a sus clientes.

Indicó que en aquellos casos en los que no se busque evitar una riña, no se dé aviso a la Policía o no se advierta a algún cliente de la posibilidad de que su contrincante pueda regresar con una arma, pueden ser causales por las que no se permita la reapertura en base a la reciente reforma a la Ley de Alcoholes.

La citada reforma entró en vigencia, luego de que en la mayor crisis de inseguridad, los propietarios de ese tipo de negocios, llevaban la de perder cuando en el interior de sus establecimientos se registraban hechos de sangre.

“Llegaban los comandos armados a victimar a alguien y pues en estos hechos, los propietarios de esos lugares o el personal que ahí laboraba, no tenía nada que ver”, señaló Olivas.

El hecho más reciente ocurrido en esta frontera, se registró el pasado fin de semana en el interior del bar Los Tres García, ubicado en la zona Centro de la ciudad, luego de una riña.

Aparentemente después del enfrentamiento físico y verbal, uno de los contrincantes salió del lugar y regresó minutos después con un arma de fuego con la que provocó la muerte a un hombre y le causó lesiones severas a otro de ellos.

Olivas Rico indicó que la deliberación sobre la clausura o no de este negocio ubicado en la zona Centro, será luego de conocer los reportes que emitan Seguridad Pública y la Fiscalía General del Estado.

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