HUNUCMÁ.— “Si se comprueba que no respetó el horario, será clausurado”, respondió ayer el director de la Policía Municipal, Guy Freyre Núñez, luego que el miércoles el vecino Wílliam Uicab Tzab denunció que el alcalde Delio Jaime Pérez Tzab, el tesorero municipal, Juan Balam Euán, y otros colaboradores estuvieron embriagándose el martes de 1 de la tarde a 10:30 de la noche en el bar “La Cruz Verde”, el cual debió cerrar a las 10 p.m.
—El bar debe de cerrar a las 10 de la noche —confirmó el jefe policíaco.
Uicab Tzab se quejó de que ocho policías vigilaban la cantina desde la calle 33 entre 22 y 24 y, además, intentaron detenerlo luego que tomó fotos del bar funcionando a altas horas de la noche, pero logró zafarse y corrió a la tienda “La Rosita”, donde los ocho agentes entraron y tiraron mercancías, y la dueña del comercio, Carolina Tzab Uicab, les sacó.
Carolina Tzab Uicab, dueña de la tienda y tía del alcalde, confirmó anteayer que policías tiraron mercancías en su negocio.
Al respecto, Freyre Núñez dijo que fueron dos los agentes que entraron por Uicab Tzab a la “La Rosita” y uno de ellos resbaló al entrar y botó algunas mercancías que estaban en la puerta.
Sobre el señalamiento de que policías custodiaban el bar, el jefe policíaco afirmó que en la calle había sólo una camioneta con los dos agentes, quienes “fueron los que pretendieron detener a Uicab Tzab” en “La Rosita”.
También dijo que suspendió por 72 horas al agente Jacobo Quintal Ku, a quien Uicab Tzab acusa de darle dos puñetazos a la cara “de parte del presidente Delio” el mismo martes en la noche en la calle 39 entre 32 y 34.
Presente en la entrevista, Quintal Ku no negó que golpeó a Uicab Tzab, pero alegó que éste lo siguió y acosó.
Dijo que el martes estuvo de descanso y en la noche estuvo en “La Cruz Verde”.
A la pregunta de si estaba con el grupo del alcalde, respondió: “¡Jeeeloouu! ¿Cómo crees que un indio como yo tomé con gente importante?”.
Tanto el director, como el agente precisaron que éste labora todos los días de 5:30 de la mañana a 5 de la tarde.— JOSÉ W. COB CHAY