Un usuario de Facebook denunció en su perfil que el sábado a la noche no lo dejaron entrar al bar Barone de avenida Alem al 500, mientras que desde el comercio dijeron que se comunicarían con él “para saber bien qué pasó”.
La denuncia fue compartida por más de 400 usuarios y recibió más de 30 comentarios, incluso Manuela Azpeitía dijo que le pasó lo mismo en ese lugar cuando fue con una amiga.
Fernando agregó que “decidimos esperar un rato para ver si salía gente y podíamos entrar, pero en esa espera todo de pronto se volvió claro: salía gente, el lugar no estaba lleno, pero nosotros y un puñado de gente más, cuidadosamente seleccionada, no estaba habilitada para entrar . ¿Quiénes no eran clientes? Chicas con un rollito o algun añito de más, flacos con un color más oscuro de piel, o con una campera o con un par de lentes no muy cool… Elitismo puro, asqueroso, indignante, retrógrado y fascista”.
Agregó que volvió a acercarse y le preguntó a quien estaba en la puerta: “’¿Qué onda el bar?’ Y me contestó ‘no los puedo dejar pasar, órdenes del dueño, mejor no esperen porque no van a poder entrar’, mientras un par de rubias y 2 tipos fashion entraban como panchos por su casa”.
También escribió: “‘La casa se reserva el derecho de admisión’ no aplica cuando estás discriminando en mi cara a un tipo con muletas. Eso es segregación, a mí no me la podés dibujar”.
En tanto, el encargado del bar de nombre Juan (prefirió no dar su apellido), dijo que Barone está abierto toda la semana y “a todo el mundo” y que “a veces cuando hace frío hacemos entrar primero a las mujeres. Tenemos una capacidad para 150 personas sentadas y algunas en la barra. Y cuando hace calor podemos usar la terraza”.