
Después de la polémica y el revuelo que suscitó en las redes sociales, llegó la suspensión: finalmente, el bar de Gonnet que promocionó una fiesta por el Día de San Valentín con consignas discriminatorias no realizará el evento, que estaba previsto para hoy, informó la delegación local del Inadi.
La decisión se conoció a través de un comunicado en que el organismo destacó que la sociedad está “más atenta” ante este tipo de situaciones.
Tras una reunión con los dueños del bar y bailable Brooklin Club, de camino Centenario y 511, el director de Políticas contra Discriminación del Inadi, Pablo Roma, dijo que “es importante que se haya logrado un compromiso para que el evento en el cual se iban a violar normativas vigentes” en la materia “no se realice”.
La polémica surgió la semana pasada por la promoción en redes sociales de una fiesta por el Día de los Enamorados, sin la presencia de “gente cabezas” ni “pendejitos de 12 años”.
En ese marco, el Instituto Nacional contra la Discriminación, la Xenofobia y el Racismo intervino al tomar conocimiento del caso y logró la cancelación del evento, que era difundido en Facebook. Roma mantuvo una reunión con los dueños del Brooklin Club, quienes confirmaron que no realizarán la fiesta.
“Por supuesto, que esperamos su cumplimiento. Este caso es bastante paradigmático para nosotros”, dijo el funcionario.
EL PAPEL DE LAS REDES
Sobre la difusión del caso Roma agregó: “Vemos con beneplácito que se pudo actuar rápidamente, entre otras cosas porque tenemos una sociedad cada vez más atenta a este tipo de hechos”, que lo denunció “apenas se difundió por las redes sociales”.
Precisamente, como comentó este medio en su anterior edición, el revuelo cobró fuerza a partir del repudio que generó la publicación en las redes sociales. Daniela Vendittuoli, quien radicó la denuncia ante la sede del INADI local, relató que días atrás había recibido a través de Facebook la invitación para participar de la fiesta en la que se promocionaba que no se dejaría entrar ni “cabezas” ni “pendejitos”.
“Me pregunté por qué nadie reaccionaba ante esas expresiones e hice lo que había que hacer, la denuncia”, apuntó.
Además de llevar la denuncia ante el INADI, la joven organizó una cadena de repudio a las publicidades discriminatorias. “Ellos pueden reservarse el derecho de admisión, pero no tienen por qué calificar a nadie como ´cabeza´”, concluyó.
DIFUNDEN PEDIDO DE DISCULPAS
Por otra parte, el funcionario del Inadi señaló que, al margen de la polémica en las redes “estuvo el accionar por diferentes sectores del Estado, como el Inadi, que están atentos a este tipo de situaciones”.
Roma indicó que en el organismo quedó, “por otro lado, la preocupación permanente para trabajar para erradicar este tipo de miradas excluyentes hacia los jóvenes y, en este caso, hacia los jóvenes de determinada condición social”.
“Que alguien crea que puede encontrar adhesión a una publicidad con contenidos racistas preocupa doblemente: por quien emite el mensaje y por el supuesto de que algún sector social se va a hacer eco”, advirtió el funcionario del Inadi.
Finalmente, ayer se conoció en la red social Facebook un mensaje en el que se afirmaba que los dueños del local reconocían “la gravedad de lo sucedido” y pedían públicas disculpas.