La historia de Pedro José Ramírez Codina está llena de éxitos profesionales, de ambiciones sin límites y de lealtades y deslealtades. Pedro J. ya de pequeñito debió soñar con la gloria y se puso en marcha muy pronto cuando la educación del colegio de los Hermanos Maristas de Logroño le hicieron ver que en esta vida si se quiere ser alguien o algo más que un bulto sospechoso, lo mejor es tener la cartera bien rellena.
Y Pedrito se preparó bien en la mejor Universidad, en la de Navarra mientras estudiaba la carrera de derecho, inició periodismo.
Pedro J. mostró sus ansias cuando en las elecciones del 82 colaboró con el equipo de campaña e imagen del Psoe, las promesas del listillo de Felipe en cuanto a ofrecerle un sillón en el hogar socialista como portavoz del Gobierno le hizo idealizar al abogado sevillano, hasta tal punto que durante el tiempo que duró la campaña electoral le seguía a todas partes como fiel “escudero”. Llegado el triunfo, Felipe Gonzalez nombró a Eduardo Sotillos portavoz del Gobierno dejando con los pantalones abajo y el culo al aire al leal Pedro J.
No olvidó nunca, e incluso seguramente no habrá olvidado aun, tamaña cabronada y juró venganza. Cuando tuvo su oportunidad y como Director del extinto Diario 16 descubrió la noticia de que el famoso GAL (Grupo Antiterrorista de Liberación) era un montaje del Gobierno de Felipe Gonzalez para proceder a la matanza de etarras y vinculados a ETA desde las cloacas del Estado. El 8 de marzo de 1986 fue cesado en la dirección de Diario 16 por negarse a silenciar la estrecha vinculación del grupo terrorista GAL con el Gobierno de Felipe Gonzalez y que finalmente quedaría probada.
La dirección de El Mundo mantuvo una línea editorial de marcado acento de derecha. En un momento llego a llamarse El Mundo del Partido Popular por la apología y publicidad que en sus editoriales y foros de opinión publicaban diariamente a favor de los “chicos de Rajoy”.
¿Qué motivos empujaron a Pedro J. a asociarse con Luis Bárcenas y destapar el tema de la agenda y los sobres con dinero negro, aportado por empresas y empresarios afines al Partido Popular y después beneficiarios de contratos públicos y prebendas de todo tipo en zonas “dominadas” por los populares?
Pedro J, que en eso del “destape” tiene mucha experiencia, no debió sopesar el valor del intelecto galaico y creyendo que el poder y la gloria estaba a su favor no dudo en lanzar edición tras edición todos los trapos sucios y mierdosos entregados por Bárcenas; poniendo el ventilador en marcha al objeto de esparcir la mierda de los intestinos del P.P., se dispuso a ver la caída de Mariano Rajoy.
Posiblemente y en un alarde de camaradería en los tiempos alegres de abrazos y besos entre Marianito y Pedrito J., se hicieron promesas incumplibles de amor para toda la vida y como ya se sabe en los matrimonios es muy posible que pasado el tiempo o ella te ponga los cuernos o seas tú el que se los ponga. El caso es que de momento el divorcio entre ambas partes está servido y seguro el perdedor será, como siempre, el “pueblo soberano” que volverá a ser testigo de cargo del silencio de un medio de comunicación amordazado por y desde el poder.
No, no estamos alegres del cese de Pedro J., desde el punto de vista ético es una gran putada cesar a un periodista por divulgar la corrupción de todo un partido gobernante donde, presuntamente, están pringaos desde el Presidente hasta el botones Sacarino, pasando por todos los sinvergüenzas que figuran en la famosa agenda del no menos famoso Luis Bárcenas.