Así se ha expresado el representante diplomático israelí durante la conferencia que ha ofrecido este jueves en Valladolid, titulada ‘Relaciones Hispano-Israelíes y el mundo empresarial’, programada dentro del Aula José Berbel de la Escuela de Negocios CEU.

El diplomático israelí ha destacado que “posiblemente este año y el próximo” puede suponer un momento de “salto cualitativo” en los intercambios comerciales entre España e Israel para situarse al nivel de los que se mantiene con países europeos como Italia, Alemania, Francia y Reino Unido.

“En los últimos años ha ido creciendo el interés para buscar las oportunidades que los mercados pueden crear”, ha expresado Alon Bar, quien ha recordado que las relaciones comerciales entre ambos países no han sido tradicionalmente muy intensas por varios factores.

En primer lugar, se ha referido a que la economía española ha tenido a su juicio unas características “no muy basadas en la búsqueda de mercados exteriores más allá de los tradicionales, como Sudamérica y Europa”.

También ha citado que las relaciones diplomáticas entre ambos países son “relativamente recientes” pues no se establecieron oficialmente hasta 1986 pese a que habían existido “vínculos culturales, emocionales y sociales” con la Comunidad sefardí, descendientes de los judíos que vivieron en España hasta el Siglo XVI. “Los judíos nunca la abandonaron y España nunca abandonó el corazón de los judíos que proceden de ella”, ha reflexionado.

Asimismo, ha destacado que existía “preocupación” de que, al intensificar los contactos comerciales con Israel, se podrían ver perjudicadas las relaciones que, a juicio del embajador, sí que ha tenido España con el “mundo árabe”.

Sin embargo, ha subrayado que “no tiene por qué ser así”, ya que las empresas internacionales que han comenzado negocios con Israel “no han perdido presencia en el “mundo árabe”.

También ha apuntado que en España nunca ha existido una comunidad hebrea “activa” como la de otros países, como Holanda, Reino Unido y Francia.

Pero en la actualidad, Alon Bar ha apuntado que parece que el intercambio comercial puede ir “más allá” de los ámbitos en los que se produjeron operaciones económicas incluso antes de establecerse esas relaciones comerciales, como las infraestructuras agrícolas y la tecnología de defensa.

Así, en estos próximos años, según el embajador, se puede profundizar en áreas en las que Israel está muy interesado, como las infraestructuras por carretera y ferrocarril, que no están excesivamente desarrolladas, el transporte de gas natural y la investigación y tecnología.

En este último aspecto ha incidido especialmente Alon Bar, ya que en el país del Oriente Próximo existe el concepto de crear un “ecosistema de innovación”, basado en la educación en investigación científica, la formación empresarial y la producción de ideas y productos.

CULTURA EDUCATIVA Y EMPRESARIAL

El embajador ha destacado que la cultura educativa y empresarial de los hebreos aporta “ventajas” para esta tarea, ya que la “economía del conocimiento” ha sido un “valor muy imprescindible en la tradición judía”.

Así, ha recordado que “antes de la creación del Estado israelí en 1948” ya existía una infraestructura universitaria que fue el embrión de centros “punteros” en la actualidad como el Instituto Weizmann, las universidades de Jerusalén y Tel Aviv o el Campus de Ber Sheva, donde se desarrolla un polo empresarial especializado en la ciberseguridad, campo en el que Bar augura que Israel será “una potencia” en pocos años.

Alon Bar ha expuesto sus puntos de vista acompañado por los representantes de la Fundación San Pablo-CEU, Raúl Mayoral y Pedro Berbel. A la charla han asistido autoridades locales y regionales como el alcalde de la ciudad, Francisco Javier León de la Riva; la consejera de Agricultura y Ganadería de la Junta, Silvia Clemente; y la viceconsejera de Política Económica, Begoña Hernández.