Madrid, 2 oct (EFE).- “Hora feliz”, plural “horas felices”, es una alternativa en español al anglicismo “happy hour”, señala la Fundación del Español Urgente, promovida por la Agencia EFE y el BBVA.
En los medios de comunicación se emplea a menudo esta voz inglesa: “El local abre de martes a domingo, de 17 a 24 (happy hour, de 17 a 19)”, “Como toda buena cantina o bar, no puede faltar la happy hour” o “Se prohibirán las promociones de venta y consumo de bebidas alcohólicas, como los ‘happy hours’ y la barra libre”.
El diccionario “Merriam-Webster” define “happy hour” como ‘tiempo durante el cual los bares sirven bebidas a un precio inferior al habitual’. A partir de la expresión inglesa, se ha generalizado el calco “hora feliz”, hasta el punto de que ya lo recogen los principales diccionario de uso, como el “Diccionario del español actual”, de Seco, Andrés y Ramos, que define tal locución como ‘en un bar o establecimiento similar, periodo del día en que se reducen los precios o se hacen ofertas especiales’.
Dada la extensión de este calco y su inmediata comprensión por parte de la mayoría de los hispanohablantes, en los ejemplos anteriores habría sido recomendable escribir “El local abre de martes a domingo, de 17 a 24 (hora feliz, de 17 a 19)”, “Como toda buena cantina o bar, no puede faltar la hora feliz” y “Se prohibirán las promociones de venta y consumo de bebidas alcohólicas, como las horas felices y la barra libre”.
Como se ve en este último ejemplo, el género es femenino y el plural regular: “las horas felices”.
En caso de optar por la expresión inglesa, se recuerda que lo adecuado es destacarla con cursiva o, en caso de no disponer de dicho tipo de letra, entre comillas.
La Fundéu BBVA (www.fundeu.es), que trabaja asesorada por la Real Academia Española y cuyo principal objetivo es el buen uso del español en los medios de comunicación, cuenta con la colaboración, además, del Instituto Cervantes, la Fundación San Millán, Accenture, Gómez-Acebo Pombo, CELER Soluciones, Hermes Traducciones, Linguaserve y Abengoa. EFE