La presidenta de la Diputación Provincial de Guadalajara, Ana Guarinos, se ha trasladado hasta la pequeña localidad de Gárgoles de Arriba para visitar dos establecimientos rurales que han recibido subvención dentro del programa de ayudas de la Institución para el mantenimiento de la estructura comercial. Se trata, como ha explicado la presidente, de un programa que cuenta con muy buena aceptación y que supone una ayuda importante para las personas, autónomas, que regentan comercios en los núcleos rurales con el consiguiente esfuerzo que ello supone para su mantenimiento. Por ello, Guarinos ha destacado el trabajo que supone sacar adelante este tipo de establecimientos en pueblos donde, sobre todo en invierno, se reduce considerablemente la población. En este sentido, ha resaltado la utilidad de estas ayudas que van destinadas a trabajadores autónomos dedicados a actividades comerciales tradicionales con despacho directo al público y actividades de bar y de panadería, pastelería y derivados, así como de frutería, carnicería y pescadería, según se establece en las bases de esta convocatoria.

La máxima responsable de la Institución Provincial ha visitado el comercio de alimentación y bebidas de Sagrario de la Fuente y el bar cafetería, que también ofrece alimentación y bebidas, de Sagrario Recuero, ambos situados a la entrada del pueblo que cuenta con alrededor de 150 habitantes. Ana Guarinos se ha interesado por el funcionamiento de estos comercios conversando con las propietarias de ambos comercios sobre el día a día en el municipio donde han estado presentes también el diputado delegado de Promoción Económica, Alberto Domínguez, el diputado provincial Francisco Javier del Río así como representantes del Ayuntamiento de Cifuentes.

En concreto, el Bar ha recibido un total de 713 euros y la tienda de Sagrario de la Fuente 558 euros. “Son pequeñas ayudas que pueden contribuir a hacer frente algunos pagos y que para estos comercios son muy bien recibidas”, ha dicho Guarinos explicando que el programa de ayudas está dotado con 125.000 euros y que este año ha llegado a un total de 174 establecimientos comerciales ubicados en pueblos de la provincia con menos de 300 habitantes, oscilando las ayudas de los 300 a los 800 euros.

En este sentido, la presidenta ha incidido en una de las novedades que introdujo el actual equipo de Gobierno que decidió aumentar el límite de población de 250 habitantes que era lo que tradicionalmente venía establecido, hasta los 300 habitantes; abriendo así el abanico a más pueblos y pedanías de la provincia. Además, también se ha ampliado la cuantía económica del programa de 100.000 a 125.000 euros.

Algunos de los pueblos donde se encuentran los comercios que han recibido ayuda son Campillo de Dueñas, Canredondo, Durón, Corduente, Gualda, Las Inviernas, La Toba, Lupiana, Algar de Mesa, Arroyo de Fraguas, Atanzón, Bustares, Valdarachas, Poveda de la Sierra o Retiendas, entre muchos otros.

Para la resolución de estas ayudas se establece un baremo de puntos en función de cuestiones como el número de días que el establecimiento está abierto al año, si existen uno o varios comercios en el mismo municipio, etcétera. Se favorece así el mantenimiento y la consolidación de la estructura comercial en el medio rural, teniendo en cuenta que el pequeño comercio “contribuye a mantener el empleo y la población en estos municipios y, además, facilita a sus vecinos el acceso a un comercio cercano o un lugar de encuentro y esparcimiento para su vida social, mejorando con ello la calidad de vida en los pueblos más pequeños”, ha dicho Guarinos.

Por su parte, las propietarias de los establecimientos se han mostrado agradecidas por la ayuda de la Diputación que sirve para cubrir algunos gastos fijos derivados de la actividad.