• Pepa Font y Juan Carlos Signes (CU) exhiben varios dictámenes de técnicos del ayuntamiento, así como la licencia de demolición del Bar Mediterráneo que firmó María Mut (PP)
• Los informes avalan la postura de los partidos de la oposición, que desmontaría la teoría de los populares de que se han desprotegido 248 edificios

Los dos concejales de Centre Unificat en el Ayuntamiento de Dénia, Pepa Font y Juan Carlos Signes, comparecieron este martes para repasar la controversia de los últimos días en relación a la situación en que se encuentran los edificios protegidos por el catálogo de bienes inmuebles del ayuntamiento. Y, de paso, para arremeter duramente por esta cuestión contra el Partido Popular, acusándole de intentar imponer -pese a estar en minoría- un nuevo Plan General redactado “en un despacho” y “de espaldas a la ciudadanía”.

Pepa Font muestra la licencia de derribo del Bar Mediterráneo a los periodistas, ante la mirada de Juan Carlos Signes.

Los centristas han tardado unos días más que el resto de grupos en entrar en la controversia y ha sido, señaló Font, porque querían recabar información para sustentar sus valoraciones. Y así fue como CU llegó a la sala de prensa municipal cargado de informes y licencias municipales con los que intentó desmontar la versión que, en solitario, mantiene el PP sobre este asunto. A saber, que el único catálogo que existe es el que reduce en 248 el número de edificios protegidos en relación al que estaba en vigor desde 2004, pues los populares sostienen que este último ya no tiene vigencia desde que, en septiembre de 2012, se anuló el Plan General Transitorio.

Sin embargo, Font mostró ayer varios informes municipales, suscritos por técnicos de administración general (TAG), que dicen lo contrario. Se trata de dictámines emitidos en relación a diferentes inmuebles que eran sometidos durante el año 2013 a la Comisión Mixta Dictaminadora, el organismo técnico-político que tiene la potestad para decidir sobre los niveles de protección de los inmuebles. Informes, por tanto, posteriores en fecha a la anulación judicial del Plan General Transitorio (PGT) y que, sin embargo, parecen avalar las actuales tesis de la oposición, que asegura que aquella sentencia no acarreaba la anulación del catálogo de 2004 que incorporó el PGT. Y es que en los informes que exhibió Font, los TAG apelan precisamente a las fichas de aquel catálogo para comunicar que los inmuebles estaban protegidos.

En cualquier caso, Font insistió en la necesidad de que, tal y como pidieron todos los partidos de la oposición en el último pleno, el secretario municipal emita un informe que aclare la situación.

CU estudia pedir responsabilidades por el derribo del Bar Mediterráneo

Ya lo advirtió en el último pleno, cuando Vicent Chelet (PP) anunciaba que el gobierno local iba a remitir más documentación a la Fiscalía para que investigue lo sucedido con el derribo del antiguo Bar Mediterráneo. Pero ayer lo concretó. Pepa Font anunció que su grupo podría pedir responsabilidades por aquella demolición, y lo hizo exhibiendo a los periodistas el documento firmado por la concejala popular María Mut, de concesión de la licencia de derribo.

No obstante, Font no dejó claro si las responsabilidades se le podrían reclamar a la propia Mut, o al técnico que firmaba también la licencia: el arquitecto municipal, Rogelio Mira. Parece que más bien lo segundo, ya que la concejala de CU añadió a continuación que “al final los políticos firmamos siguiendo los informes de los técnicos”.

“El PP nos ha engañado miserablemente”

Por otra parte, Pepa Font y Juan Carlos Signes no sólo mostraron documentos en su comparecencia. También repartieron recados y críticas al PP, pero muy especialmente a su concejal Vicent Chelet.

Signes lamentó que los populares hayan tirado por la borda los “tres años y medio de trabajo” realizado para elaborar un Plan General y lo sustituyan ahora por otro “hecho en un mes” (el tiempo transcurrido desde la ruptura del pacto). Y dado que es “imposible” hacer un PGOU en ese plazo, Font añadió que se demuestra que el PP llevaba mucho tiempo elaborando ese documento de planeamiento a pesar de que esa competencia recaía en Centre Unificat. Por tanto, añadió, “nos estaban engañando miserablemente”.

Además, la portavoz de CU criticó que, “igual que en el caso del Plan Especial de la Ronda”, el PGOU que pretende presentar ahora al PP se ha elaborado “en un despacho cerrado y de espaldas a la ciudadanía”. Todo lo contrario, en su opinión, de lo que debería ser un Plan General: “No simplemente un conjunto de planos donde a unos les va mejor y a otros peor, sino un proyecto de futuro, donde se plasma lo que una ciudad quiere, que marca hacia dónde vamos y qué queremos legar a nuestros descendientes”.

resaltó que “en un mes -el tiempo transcurrido desde la ruptura del pacto- es imposible hacer un Plan General” . Y eso demostraría