Un hecho difícil de explicar se produjo hoy, durante la madrugada, en el bar La Pulpería del centro de Luján de Cuyo. Es que un efectivo policial que debía detener los disturbios que estaban realizando un grupo de jóvenes terminó en el suelo, con los ligamentos de su rodilla cortados, y posteriormente debió ser trasladado al hospital.
El hecho se produjo bien entrada la madrugada en ese bar de Luján, donde los efectivos de la comisaría de ese departamento llegaron ante el llamado de los vecinos. Al acercarse al negocio, ubicado a metros de calle San Martín, vieron como unos 10 sujetos gritaban y rompían objetos de la vía pública.
Lo curioso del hecho es que, luego de intentar persuadir sin éxito a los jóvenes para que depongan su actitud y detengan los disturbios, los efectivos intentaron detenerlos. En ese momento el cabo Darío Rodríguez resbaló, cayó al piso y luego se constató que sufrió una lesión en su rodilla: se cortó los ligamentos cruzados.
Si bien los compañeros del efectivo lesionado lograron detener a uno de los agresores luego debieron liberarlo, ya que el resto de los sujetos comenzaron a golpear a los policías.