Perry y Castro, ambas defensoras de los derechos de las comunidades LGBT en sus respectivos países, “llegaron juntas al bar y charlaron durante más de una hora”, declaró a la AFP la gerente del Sarao’s Bar, ubicado en el céntrico barrio del Vedado.
“No consumieron nada, solamente conversaron y se tomaron fotos”, añadió la mujer, que prefirió no revelar su identidad.
La agencia cubana Prensa Latina destacó que Mariela explicó a Perry la labor que desarrolla el Centro Nacional de Educación Sexual (Cenesex), el cual dirige con el objetivo de desarrollar la cultura de la sexualidad, defender los derechos de los transexuales y homosexuales -perseguidos en la isla tras la revolución de 1959-.
Asimismo, la invitó a participar en la jornada contra la homofobia que el Centro organiza anualmente.
“Katy (…) expresó su admiración y respeto por quienes se dedican a estas causas y dejó un mensaje al despedirse: ‘Que todos sean libres de ser quienes son”, añadió Prensa Latina.
El Cenesex publicó en su página de Facebook una decena de fotos de la visita al bar, en una de las cuales Perry y Mariela posan sonrientes frente a cámara.
Perry, uno de los fenómenos más recientes de la nueva ola del pop estadounidense, ha visitado La Habana dos veces esta semana.
Retornó a la isla el miércoles tras ofrecer un concierto en Puerto Rico, para continuar la visita que había iniciado el fin de semana, y visitó la sede de la compañía infantil La Colmenita, donde conversó, cantó y bailó con los niños que la integran, según el diario oficial Granma.
Anteriormente, había visitado el Centro multicultural “Fábrica de Arte Cubano” y asistido a una presentación del salsero cubano Issac Delgado.
Perry se sumó a un grupo de estrellas de fama internacional, entre ellos la cantnte Rihanna y el líder de los roqueros Rolling Stones, Mick Jagger, que han visitado Cuba en los últimos meses, tras el histórico deshielo con Estados Unidos, que llevó a ambos países a reanudar sus nexos diplomáticos en julio, tras medio siglo de ruptura.
(AFP)