jmonroy@diariolatribuna.com
La Junta de Gobierno Local concedió el pasado 12 de junio licencia de obras a la empresa Hostelería del Casco SL para adaptar parte del enorme local de La Provisoría como bar-restaurante, según el proyecto de ejecución que presentó el 13 de febrero y que tuvo una modificación de visado un mes más tarde. Se trata de una obra muy polémica, por cuanto tanto la Real Fundación Toledo, como Iniciativa Ciudadana y más tarde IU han criticado la apertura de nuevos espacios en la fachada (en la misma manzana que el convento de Madre de Dios) y sobre todo la actuación particular de esta empresa en el espacio público de una esquina en la plaza de Juan de Mariana, donde existe un árbol histórico y una fuente monumental, un espacio hasta ahora reservado para el aparcamiento de motocicletas. La licencia municipal no habla de ninguna de estas dos cuestiones motivo de queja institucional, política y vecinal, y se limita tan sólo a dar el visto bueno al proyecto presentado, que no se adjunta al documento.
La licencia de obra para la actuación en Juan de Mariana ha requerido de un proyecto y, dado que está en un área patrimonial del Casco, del informe favorable del arquitecto municipal, el dictamen favorable de la Comisión Espacial para el Patrimonio Histórico (celebrada el 30 de abril) y la resolución positiva de la Dirección General de Cultura, con fecha del 28 de mayo. La licencia exige un control arqueológico, una salida de humos mediante la eyección en la salida de la chimenea y otras medidas correctoras fijadas en la Ponencia Técnica Municipal de Saneamiento.
También se da una circunstancia curiosa: la licencia establece que el inicio de la obra tendrá que producirse durante los tres meses siguientes a la notificación de la licencia de la misma. Pues bien, para la fecha de aprobación de la misma, la obra ya llevaba tiempo en marcha.
Informe del arquitecto. Es en el informe técnico del arquitecto municipal, firmado el 11 de noviembre de 2013, donde se menciona escuetamente que, «el proyecto presentado plantea la adaptación de una parte del local existente para convertirlo en un bar-restaurante, manteniendo en el resto el citado uso comercial. En la misma se modifica un hueco exterior de la fachada». No hay más referencias a la actuación en el espacio público por parte del privado en los documentos municipales.
Curiosamente, el arquitecto basa su visto bueno en función de que «en el momento actual se encuentra aprobado definitivamente el Plan de Ordenación Municipal de Toledo», que establece la aplicación de PECHT. Y advierte que si bien Madre de Dios está catalogado como edificio monumental, esta zona de actuación pertenece a un inmueble independiente, que sólo en una zona está debajo de la construcción conventual.