Los bomberos del parque intercomarcal de Silleda se vieron obligados en la mañana de ayer a desplazarse hasta el núcleo del casco urbano de Silleda para llevar a cabo una maniobra de rescate. Se trataba de un niño, que rondaba los dos años y medio de edad, y que se había quedado atrapado en el servicio del bar O Refuxio, ubicado en la Rúa da Estación de la localidad trasdezana. Según apuntan, el menor pasó el pestillo y, cuando quiso volver a salir, dada su altura, no fue capaz de llegar a él de nuevo, por lo que no pudo abrir la puerta.
Hasta el establecimiento se trasladaron efectivos de la Policía Local de Silleda y los bomberos, que recibieron el aviso a través de una llamada del servicio de emergencias del 112. Estos últimos, ante la inexistencia de otra posible entrada al habitáculo más que la puerta o un sistema de ventilación por el que pudiesen llegar a acceder, se vieron obligados a forzar el pasador metálico. El niño, que no sufrió ningún daño más allá del susto ocasionado por la situación, había acudido al local acompañado por su abuela.