Los vecinos de Las Casas del Conde, con la colaboración del Bar Raíces, ya están pensando y organizando su próxima cena de convivencia que será el sábado 22 de noviembre para celebrar la festividad de Santa Catalina, a quién está dedicada su iglesia.
Un encuentro “hasta que el cuerpo aguante” y al que están convocados vecinos, familiares o simplemente allegados de este bonito pueblo de la Sierra. Cabe subrayar, eso sí, que quien quiera participar en la ‘cena de Santa Catalina’ debe apuntarse en el Bar Raíces
Un pueblo pequeño pero lleno de vida
Las Casas del Conde es uno de los pueblos más pequeños de la Sierra de Francia, con algo más de 55 empadronados, y que como ocurre en otros pueblos, durante el invierno sólo viven permanentemente en él una treintena de personas.
No obstante, como ocurre en otras localidades similares, durante los fines de semana muchas personas regresan para visitar a sus familiares, realizar labores agrícolas, disfrutar de la tranquilidad y la naturaleza, o reunirse para cenar con sus vecinos o amigos en el único bar del pueblo, “El Raíces”.
Otro motivo de encuentro en el bar son los partidos de fútbol, por supuesto, como ocurrió el mes pasado con el Real Madrid-FC Barcelona, cuando según afirma uno de los vecinos del pueblo “había en el bar y su terraza casi tantas personas como en Agosto”.
También en el mes de octubre, aprovechando la buena temporada de setas en la Sierra de Francia, unos cuantos vecinos y amigos de Las Casas del Conde, se reunieron a cenar dos noches seguidas para degustar las setas recogidas durante el día, conversar y pasar un rato divertido con las anécdotas del pueblo.
La fiesta de Santa Catalina en primera persona
Juan José Acera Tejeda, vecino del pueblo, nos cuenta que “Santa Catalina de Alejandría es la patrona de Las Casas del Conde y en la iglesia está su estatua (la de las mejillas colorás). Murió doncella por defender su dignidad y es por ello que en nuestro pueblo además de ser fiesta era también la fiesta de los mozos solteros”.
“Antiguamente era fiesta oficial en el pueblo”, continúa este vecino, “y por la noche se acababan juntando los mozos a cenar, eso sí, solo los hombres. Además de honrar a la santa se bailaba y cantaba a otras ‘Catalinas’ con coplillas que aún hoy repetimos. Ahí va algún estribillo…
“Santa Catalina era / una moza santa y bella / y los mozos de este pueblo / queremos ser como ella / Santa Catalina tiene / una rosa en el mandil / que se la dio Simón Vela / un 25 de Abril”
“Como era natural antaño, entre las mozas del pueblo había bastantes Catalinas y a alguna también le dedicaron la siguiente coplilla”
“Te casaste con Juan Pérez / ¡Qué más quieres, qué más quieres..! / te metió la palitoria / ¡Qué más gloria…qué más gloria….!
“Hace unos 20 ó 25 años empezamos a juntarnos también los casados con solteros pero solo íbamos los hombres y desde hace unos 15 años también van las mujeres y todo el que quiera. La cena simplemente se ha quedado en una excusa para cenar juntos y pasar una velada agradable casi familiar entre vecinos y amigos al calor de la estufa de ‘El Raíces’ en una de esas largas noches de invierno. Suele haber siempre tamborilero y algún año ha habido karaoke que creo que este año se va a repetir “
Un pueblo conectado al mundo
Desde Las Casas del Conde, a pesar de su ‘lejanía del mundanal ruido’, también están conectados al mundo vía redes sociales. Así invitan a todos los vecinos y amigos del pueblo a formar parte de los grupos de facebook creados por personas allegadas al municipio, donde se informa habitualmente de lo que ocurre en el pueblo y en las Sierras de Salamanca en general o encontrar fotos y vídeos de la localidad.
Eso sí, matizan los casacondeños, “lo mejor para conocer el pueblo y enterarse de acontecimientos como la próxima cena de Santa Catalina es venir al pueblo en persona, hablar con sus vecinos, tomarse un café o una caña en el Bar Raíces… y respirar la Sierra desde este rincón maravilloso”
En los próximos meses de invierno, a pesar del frío y del mal tiempo, o por eso mismo, a los casacondeños no les faltará alguna razón para reunirse a cenar en ‘El Raíces’.
Raúl Mateos
SALAMANCArtv AL DÍA – Cuaderno de Entresierras