Martín Rocco es contundente: “El stand up es un género en vivo”, donde la conexión con la gente y ese cara a cara con el público es lo primordial. Y él no sólo lo dice, sino también lo hace. Por eso en su espectáculo “Apaguen los celulares” hace una verdadera advertencia: se trata de un show en vivo, por lo tanto, el que se distrae, pierde. Lo presentará el jueves por la noche en Alta Gracia Bar Comedia de Güemes, donde mañana abrirá el ciclo de actuaciones en la ciudad con “20 años de stand up”, recopilando anécdotas de un camino andado en diferentes escenarios, bares y set de televisión.
Después de tantos años emparentado con el género, Rocco tiene mucho para contar sobre el stand up. Sobre todo en este tiempo que el boom del monólogo se disemina por todos lados y con quien quiera que se anime a tomar el micrófono. Sin embargo, según él hay que hacer varias aclaraciones, porque no todo es tan sencillo a la hora de hacer reír.
Antes de llegar a Córdoba, donde también dará un seminario el viernes, Martín Rocco dialogó con La MAÑANA dando algunas claves del universo del stand up.
– Hace unos años todo parece ser stand up, ¿por qué estalló ahora este boom?
– Creo que fue la televisión lo que lo impulsó, que lo masificó en cierta medida. Igual hubo dos momentos. Un primer boom fue en el 2001, con toda la crisis, que el género sobrevivió en bares, y el segundo con esta masificación con la TV.
– ¿Qué lecturas hacés de esta globalización del género?
– Creo que lo bueno que está pasando es que hay muchos artistas que están buscando su voz única. Porque lo que ha pasado es que salen muchos que hacen fotocopiados, y los chistes suenan todos bastantes parecidos. Pero a la vez hay mucha gente que tiene estilo propio y mucho para decir. Personas que quieren hablar de algo dejando de lado el remate desesperado y fácil. También creo que ahora al stand up lo posicionan como de los jóvenes, y me deja un poco afuera de esto por ser post 40. Y no es así, todo lo contrario, cuanto uno más crece, más tiene para decir.
– Das cursos desde hace años, ¿cuáles son las claves que les das a los alumnos para empezar a hacer el stand up?
– Lo primero es hacerles entender que lo importante no es ser gracioso -eso es para un asado o un crucero berreta-, sino conectar con la gente, y tener algo para decir. También que el stand up es en vivo, hay en TV con cámaras y reidores, pero no es así. El stand up funciona con la conexión, porque se trabajar sobre un texto y su interpretación.
– ¿Y quiénes se interesan por aprender stand up?
– De todo, di clases desde el 2000 al 2004 y uno ve actores, comediantes, gente del clown pero también personas que no son de la escena. Y está muy bueno lo de la formación porque es importante aprender, porque mucha gente piensa en algo fácil, que uno se para y es difícil, uno se expone, uno es uno ahí con tu texto.
– Has visitado muchos lugares, ¿la gente se ríe de lo mismo en todos lados?
– El humor es diferente en todos lados, me pasó que estuve en España en bares y había que hacer chistes de la suegra porque si no nadie se reía. Que se yo, muy bajo. Por eso es importante para mí estar en Córdoba, porque acá tienen su acento y su propio estilo, y no está contaminada. Me encanta el humor del Flaco Pailos, Chichilo, Cacho Buenaventura.
Para agendar. Haciendo un repaso, Martín Rocco presentará doble show: mañana “20 años de stand up” y el jueves “Apaguen los celulares”. A las 21 en Alta Gracia Bar Comedia (Bolívar 558), con entrada general de $ 80. El viernes a las 18 dará el seminario de estilos, con un costo de $ 200 e inscripciones al 156513080.