COSTA RICA.- Las costumbres para despedir a los seres
queridos son diferentes en cada país, pero este caso sorprendió hasta a la
misma localidad. Una familia decidió homenajear a un hombre sentándolo en un
bar, acompañado por una cerveza y un juego de dominó.
El homenajeado era Jomar Aguayo, quien murió durante un
tiroteo el fin de semana pasado. “Todas las personas tienen derecho a ser
veladas como quieran. Se puede considerar, incluso, una obra de arte”,
señaló la encargada de la empresa funeraria que se encargó del servicio, en
diálogo con la agencia EFE.
El velatorio causó gran polémica, pero el Departamento de
Salud de Costa Rica no encontró vía legal alguna para prohibir el particular
servicio. “Hay una opinión dividida respecto al asunto, pero nuestra
funeraria se limita a dar un buen servicio y complacer a los clientes”,
agregó la empleada.
Además de la particular situación, el cadáver de Aguayo fue
expuesto en una posición muy “realista”, y vestido con ropa deportiva
y anteojos de sol.