L. A. REAL
La temporada regular de mus en la comarca de Avilés tocó a su fin el pasado sábado por la noche en el transcurso de una espicha que sirvió para entregar los diferentes premios a los equipos participantes, para que los jugadores confraternizasen sin la presión de las cartas por medio y para esbozar lo que será la próxima edición del Campeonato Avilesino de Mus, el decano de los que se disputan en España en formato liguero.
A ese respecto, el portavoz de la organización y presidente de la Federación Asturiana de Mus, Monchi Álvarez, ya adelanta que no es descartable la idea de volver al antiguo formato (una liga única en la que todos juegan contra todos hasta la última jornada), si bien puntualizó que lo que ahora procede es recabar con calma la opinión de las diferentes peñas y sopesar los pros y los contras de cada formato; la competición musística de este año se disputó como gran novedad en dos tramos: primero una liga de dos grupos y luego otra en la que un grupo reunió a los mejor clasificados de la primera “manga” y el otro grupo a los peor clasificados en la ronda inicial.
Los protagonistas de la noche del mus fueron, sobremanera, los jugadores de la peña Bar d’Andrea, antigua peña Bar Riosol. Y no era para menos, pues los de Versalles se alzaron con los dos principales títulos en juego: campeones de la Liga y de la Copa. El doblete es de los que hacen época y supone, además, reverdecer antiguos laureles de cuando el equipo del Riosol acumulaba campeonatos a pares; así que la condición de favoritos para 2015 ya la tienen ganada.