Cuernavaca, MORELOS.- Los hechos suscitados la madrugada del sábado en el bar Eclipse, de la Plazuela del Zacate, obligará a revisar detalladamente cada uno de los permisos y en qué condiciones fueron otorgados, pues es un reclamo que va creciendo.
El secretario del Ayuntamiento, Enrique Paredes Sotelo, señaló que todos los negocios de ese lugar tendrán que demostrar que cuentan con toda la documentación que se requiere para abrir sus puertas, y dijo que hay instrucciones para que los supervisores den cuenta de las anomalías que encuentren.
En el caso del bar donde los meseros golpearon a un cliente por negarse a dejar propina, podrá reabrir sus puertas, una vez que pague la multa correspondiente, y aunque dijo que lo ideal sería cerrarlo definitivamente, se podría incurrir en la violación a los derechos de cualquier persona a dedicarse a un negocio siempre que éste sea lícito.
Explicó que esta sanción sentará precedente que los propietarios de los negocios deberán tomar en cuenta y capaciten a su personal en la atención a los clientes, pues dejar propina no es una obligación, por lo que se buscará a los empresarios del ramo para buscar opciones de capacitación.
El funcionario municipal destacó que los antros de la Plazuela del Zacate no son nuevos, con el paso de los años fueron creciendo y ahora se hará la revisión, por lo que el que no cuente con toda la documentación tendrá que bajar sus cortinas.
La Ley de Ingresos del Ayuntamiento de Cuernavaca, considera infracción contra la dignidad de las personas golpearla en forma intencional y fuera de riña, sin causarle lesión. En el caso de los meseros del bar Eclipse, sí causaron lesiones, por lo que se procedió a la denuncia y la sanción pudiera alcanzar una pena privativa de la libertad.
Ley de ingresos
El pago por retirar los sellos producto de una falta administrativa va de 20 a 35 SMV.
$2,389 es el pago máximo por quitar los sellos de clausura
“Se hará un revisión de la documentación de ese establecimiento y de los demás, para saber cuándo y en qué forma obtuvieron los permisos.”
Enrique Paredes, secretario municipal