Agentes del Cuerpo Nacional de Policía detuvieron a un joven de origen marroquí de 22 años y a una gijonesa de 32 acusados de sustraer un bolso en un establecimiento hostelero en la calle de Gaspar García Laviana y agredir luego al hombre que intentó recuperar el efecto sustraído.
Los hechos tuvieron lugar sobre las 2 de la madrugada del jueves de la semana pasada, cuando en el local se encontraban tres parejas. Fue entonces cuando una de las mujeres se percató que le faltaba el bolso, que contenía efectos valorados en más de 600 euros. Su compañero y ella decidieron salir en busca de las otras dos parejas a ver si se lo habían llevado por error. En la calle Roncal, localizaron a los luego detenidos manipulando su bolso y tirando al suelo los objetos que no querían.
Cuando el compañero de la víctima quiso recuperar el bolso, el ciudadano marroquí le golpeó con un vaso de cristal en la cara, provocándole un corte en la ceja. Con los testimonios recabados y las imágenes de las cámaras de seguridad, lograron arrestar a los sospechosos.
Por otra parte, un ciudadano de 44 años con un amplio historial delictivo, fue sorprendido in fraganti la noche del martes mientras robaba en una furgoneta aparcada en la calle de San Juan. «El autor tenía la cabeza metida por la ventanilla y en una mano portaba un destornillador. En el cacheo le encontraron dos navajas que ocultaba entre la ropa», explicaron fuentes de la Comisaría. En el interior del vehículo había muestrarios de piezas de bisutería y artesanía, «objetivo principal del delincuente».
Otro joven de 21 años fue detenido por agentes del Cuerpo Nacional de Policía acusado de agredir a otro chico de 23 que supuestamente le debía 210 euros derivados de la venta de hachís. Tal y como explican los investigadores, en agosto le facilitó varias bellotas de hachís que no le fueron abonadas ni devueltas. En alguno de los encuentros en los que el intento de cobro había sido fallido, ya habían tenido disputas y agresiones, aunque no interpusieron denuncia. Sin embargo, la semana pasada un testigó alertó al 091 de la agresión.