La Associació de Veïns Horts de Miró ha puesto en marcha una iniciativa solidaria para intentar echar una mano a aquellos vecinos del barrio que lo están pasando mal por culpa de la crisis económica. Para ello han contado con la inestimable complicidad de siete bares de la zona (Cal Guerrero, La Taberna de Reus, Hort Miró, El Toribio, La Strada, Karolina y El Boquerone), que desde hace unas semanas ofrecen ‘cafés pendientes’ a aquellos clientes que no pueden permitirse ni gastarse poco más de un euro en un café o en un desayuno.
La vicepresidenta de la asociación de vecinos, Natalia Hernández, explica que «la idea nació a raíz de que nuestra presidenta, Eva Mateu, viese esta iniciativa de los ‘cafés pendientes’ por internet. Nos pareció interesante y nos planteamos la posibilidad de implantarla en nuestro barrio, donde sabemos que hay mucha gente que lo está pasando mal».
Dicho y hecho. Natalia empezó a contactar con todos los bares y cafeterías de Horts de Miró para explicarles el mecanismo de esta iniciativa: los clientes que lo deseen dejan pagado un café (también café con leche, desayuno o bocadillo) en el bar y éste lo apunta en una pizarra donde queda constancia de las consumiciones solidarias que están pagadas y pendientes de ser gastadas. Nati Magaz, del Bar El Toribio, explica que «nos hemos sumado a esta iniciativa porque es una buena manera de ayudar a nuestros vecinos. La gente que llega al bar y de verdad lo necesita ya se nota, por lo que nunca te da la sensación de que le estés sirviendo uno de estos ‘cafés pendientes’ a alguien que te intenta engañar».
Desde su negocio, Nati Magaz destaca que «muchas de las personas que han dejado pagado un café o un bocadillo son gente que lo está pasando mal y no van muy sobrados de dinero. Por ejemplo, una chica que su marido se ha quedado en el paro y sólo trabaja ella en la familia vino el otro día y dejó pagado un café».
Desde la asociación de vecinos esperan que después de la Ganxet Pintxo «alguno más del barrio se sume a la iniciativa», comenta Natalia Hernández, quien también explica otros proyectos solidarios o de ayuda a gente necesitada que han puesto en marcha desde la asociación, como «un curso de informática gratuito, para que pueda apuntarse quien quiera y el dinero no sea impedimento. La asociación de vecinos no sólo está para organizar fiestas, sino que también intentamos ofrecer actividades que sirvan para dar un servicio a nuestros vecinos».