Por su emplazamiento entre el Mercado del Carmen, el Muelle de las Canoas y la encrucijada hacia el Casco Histórico, el proyecto del quiosco-bar de la Plaza Doce de Octubre era la oferta estrella dentro del plan que el Ayuntamiento presentó la pasada primavera para impulsar la creación de seis nuevos negocios de hostelería en distintos puntos de la ciudad. Una medida incluida en los once ejes de generación de empleo que lanzó el teniente de alcalde Juan Carlos Adame (PP). Enquistada en la burocracia, la iniciativa que supuestamente era más atractiva por su céntrica ubicación no termina de cuajar por la falta de emprendedores que hayan aceptado los términos propuestos por el Consistorio para optar a la adjudicación de esta concesión administrativa, que conlleva la construcción del local y su gestión durante 30 años.
Un condicionante ha sido el canon anual de 7.376 euros que pedía el Consistorio por la explotación del establecimiento, cuantía que se determina en la propia web municipal -en el perfil del contratante- y que se calculó en base al 10% del valor de tasación del suelo reservado para este quiosco-bar, con una superficie máxima de 110 metros cuadrados.
Como consta en el informe municipal al que ha tenido acceso este periódico, el pasado otoño se cerró la primera licitación de esta concesión administrativa sin que constara “la presentación de ninguna presentación”. Tras declararse desierto el concurso, se continuó con la tramitación del expediente por procedimiento negociado. Sin embargo, el pasado mes de enero, la Junta de Gobierno Local declaró igualmente desierta este segundo procedimiento, al no desembarcar ninguna oferta en el Ayuntamiento.
Fuentes municipales indicaron a este diario que el departamento de Adame se dispone ahora a retomar el proyecto en conversaciones con posibles inversores, readaptando las condiciones ofertadas en esta tercera vuelta.
Se resiste el asunto, como ocurrió con el bar que se licitó en el Parque Moret. De momento, mientras se desbloquea la adjudicación del de Doce de Octubre, el Consistorio tiene abierta la licitación de otro de los quiosco-bares que entraban en el plan mencionado, el que se ubicará en El Torrejón, cerca del hospital Juan Ramón Jiménez. Completan la red de espacios reservados para este tipo de negocios el Parque de Zafra, el Parque Moret, la Plaza de la Autonomía de Los Rosales y, entre otros espacios, la Avenida de Andalucía.
Cuando el plan se puso sobre la mesa, la reacción de la patronal de la hostelería fue bastante sintomática: “Los nuevos, ni comerán, ni dejarán comer”, dijeron, apuntando a una saturación del sector en la ciudad en estos momentos.