Un joven de Liverpool entró en un bar de la ciudad y pidió para tomar una barra de chocolate. Hasta aquí no hay nada raro, pero cuando le quitó el envoltorio dispuesto para empezar a comer se encontró una sorpresa bastante desagradable: al abrir el chocolate se dio cuenta de que había una avispa pegada a la tableta. La empresa Cadbury prometió una rápida investigación. /AFP