Hay que recortar gasto y lo primero de lo que se prescinde es del dinero destinado al ocio. Asturias ha pasado de ser, junto con Cantabria, la región en la que más presupuesto anual se gastaba durante el tiempo libre a quedar relegada a un quinto puesto. La corona de la diversión se la ha quedado Navarra, seguida de País Vasco, Madrid y la Comunidad Valenciana. Asturianos y cántabros siguen de la mano, en el quinto puesto, pero han tenido que entrar menos en bares y restaurantes y cortarse a la hora de elegir espectáculos y de visitar museos. El estudio de la consultora Ais Group sobre los perfiles de consumo de las familias españolas en 2013 muestra, por tanto, un vuelco en el ránking del ocio.
Las familias asturianas invierten en disfrutar de su tiempo libre, de media, 2.500 euros anuales. Ese fue su presupuesto a lo largo de 2013, 500 euros menos de lo que se gastaron el año anterior. Las cifras de Cantabria son exactamente las mismas. En cambio, los navarros tiraron la casa por la ventana y dedicaron al ocio 3.125 euros, una cifra superior a la de 2012. También los vascos y los madrileños incrementaron los euros empleados en divertirse, en concreto, cada hogar rondó los 2.800 euros. El informe destaca que los que más salieron fueron los vascos. Casi el 90% aprovechó fuera de casa las horas muertas en los últimos doce meses. Le siguen los madrileños y los riojanos.
A los españoles les gusta comer fuera de casa. Ocho de cada diez familias se dejaron parte de sus ingresos en bares y restaurantes, a lo largo de 2013, con una media de gasto de 2.375 euros, unos 140 menos que en 2012. Los asturianos también gastaron más en este capítulo, en concreto, 2.500 euros. Aunque es una cantidad superior a la media nacional, los hogares asturianos se han apretado el cinturón y ha reducido el presupuesto de comidas en casi 500 euros anuales. Nuevamente, los navarros, vascos y madrileños lideran este ránking.
Los espectáculos y los museos no son una excepción dentro del mercado del ocio y también han sufrido la contracción del gasto, aunque en este apartado las familias asturianas nunca han ido en cabeza. Solamente tres de cada diez hogares españoles pagaron por asistir a actividades culturales como el cine, el teatro o la entrada a museos. Este tipo de espectáculos apenas superaron los 300 euros anuales de presupuesto por hogar. En el Principado esa cantidad es incluso inferior y apenas supera los 200 euros. Los más cultos, o al menos los que más presupuesto dedicaron a la cultura en 2013, fueron los valencianos, seguidos de los catalanes y los navarros. La consultora Ais Group destaca que especialmente la reducción del dinero dedicado a los espectáculos en Asturias.