De absuelto en el año 2011 a culpable en 2014. Ayer a las 12 en punto del mediodía. El jurado popular del segundo juicio a J. H. I. por el asesinato de Jesús Robles Galera en el verano de 2009 en el bar Nelly de Talavera declaró al acusado culpable por ocho votos a favor y uno en contra -con siete a dos resulta suficiente- de los nueve integrantes del tribunal formado en la Audiencia Provincial. Además, ha habido unanimidad por tenencia ilícita de armas tras las tres vistas celebradas esta semana. Por estos dos delitos, el fiscal solicitaba una pena de prisión de 23 años, pero ahora el juez deberá decidir la pena de prisión.
El jurado popular consideró como justificantes del veredicto que no era posible portar a lo largo de horas el cuchillo de 20 centímetros de hoja con el que intimidó a la víctima, tal y como sostenía la defensa, que pretendía desmontar así la versión del fiscal y la acusación particular de que fue a buscar armas junto con su tío tras una discusión previa con la víctima.
Después del lance con el puñal, el tío del acusado disparó hasta en cinco ocasiones contra Jesús Robles Galera, a quien alcanzaron cinco disparos, uno de ellos mortal de necesidad. Los dos huyeron, pero la Policía Nacional se encontraba en las inmediaciones y fueron detenidos rápidamente.
Además, el tribunal popular, formado por seis mujeres y tres hombres, aportó como razones para la decisión la colocación del tío y el sobrino en el mencionado bar Nelly para considerar que se habían puesto de común acuerdo para asesinar a la víctima en un suceso que ocurrió de madrugada en un establecimiento ubicado en la calle Santa Águeda, en el centro de Talavera.
El jurado, sin embargo, no apreció el agravante de ensañamiento que pretendía la acusación particular para hacer una petición de prisión mayor.
declaración de las partes. «Se ha hecho justicia. No me ha sorprendido porque siempre he confiado en que se iba a hacer justicia. Nos ha costado, pero estaba convencida», manifestó al respecto la abogada de la acusación particular, María de los Ángeles Ten, quien representaba a la madre de la víctima. Esta última dijo a la salida de la Audiencia Provincial que sentía recompensado el dolor sufrido desde el crimen.
«A cualquier persona le parece inverosímil que lleve el cuchillo», dijo la letrada por las dimensiones del arma blanca que portaba Jesús H. I. y que, finalmente, ha sido decisiva para el jurado popular, el cual estuvo el jueves deliberando sobre el veredicto hasta que se hizo público ayer al mediodía.
opinión de la defensa. El abogado del procesado, Jaime Sanz de Bremond, manifestó que está disconforme con el veredicto del jurado. «Nos parece absolutamente increíble que se pueda declarar culpable a una persona en base a que no es posible portar un puñal de estas características durante todo el día», indicó y agregó: «El jurado ha debido estar en otro juicio porque mi cliente declaró que desde el mediodía lleva el puñal».
«Tampoco en sí mismo demuestra absolutamente nada», apuntó, puesto que la acusación se refería a que se había puesto de acuerdo con su tío para asesinar a Jesús Robles. «Hay que demostrar que se puso de acuerdo», precisó.
Asimismo, el letrado abundó que «no hay ninguna razón para el veredicto del jurado» y consideró, por tanto, que la resolución del jurado popular «no está fundamentada». A este respecto, recalcó que no se debería haber admitido y se tendría que haber devuelto. «Debe decir en base a qué», comentó Sanz de Bremond, quien echó en falta una alusión a las pruebas tenidas en cuenta para llegar a la decisión.