El hombre y la mujer detenidos por el homicidio de Osvaldo Gómez en Viedma se abstuvieron de declarar esta mañana en las indagatorias citadas por el juez Favio Igoldi.

Estela Neira y Armando Morete manejaban el “Bar 14”. Ambos fueron capturados por el asesinato de Gómez, de 72 años. La pareja no tendría relación sentimental sino que un vínculo comercial con el funcionamiento del local.

Un Chevrolet Corsa fue secuestrado en una calle del barrio Castello, aparentemente abandonado. Ese vehículo sería propiedad del joven, cuya detención ha sido librada.

La mujer fue detenida en una vivienda del barrio San Martín y el hombre en la vía pública. Además la rural Chevrolet Ipanema que quedó secuestrada frente al “Bar 14” sobre el boulevard Sussini sería propiedad del hombre detenido.

En el marco del allanamiento realizado en ese local a las pocas horas de ser encontrado el cadáver calcinado se habrían retirado una serie de elementos. Primero fue revisado cada centímetro de la vereda y se observó que los peritos colocaban carteles con números en distintos sitios, marcando rastros observados como importantes para la investigación. No se descarta que puedan ser gotas de sangre.

Luego fue abierto el local y fueron retiradas bolsas con cosas en su interior, mientras que del auto que quedó en la puerta del local también habrían sido secuestrados otros elementos, entre ellos un bidón. Todo es motivo de un minucioso peritaje.

Problemas en la renegociación del contrato de alquiler entre el propietario del local comercial Osvaldo Gómez -la víctima- y la pareja conformada por Morete y Neira -detenidos- cobra cada vez más relevancia en el marco de tratar de establecer un motivo de semejante reacción y saña con tintes manifiosos para con el desafortunado hombre.

Varios fueron los allanamientos realizados en el marco de esta causa incluido algunos en la noche del miércoles de los que participaron el juez Igoldi y el fiscal Juan Pedro Puntel, en los barrios Lavalle y San Martín.

La misma mujer

Por otra parte, Estela Neira fue una testigo importante que estuvo al filo de la imputación en el homicidio de Cristian Aguilar, ocurrido el 28 de febrero pasado en la céntrica Pueyrredón al 400.

El hombre fue asesinado de un disparo de carabina mientras dormía. El agresor ingresó a la vivienda sin forzar ninguna abertura. Juan Mario Contrera fue procesado y está detenido por ese crimen bajo la imputación de “homicidio gravemente agravado por haber sido cometido mediante uso de arma de fuego y con alevosía”.

El juez penal Carlos Mussi al resolver ese procesamiento sostuvo que “todo indica que el motivo de conflicto entre Contrera y Aguilar habría sido la relación sentimental que ambos habrían tenido con la pareja de la víctima”. La mujer en cuestión fue Neira, quien habría sido pareja primero del imputado y luego de Aguilar, según estableció esa investigación.