Pese a que las reformas a la Ley de Salud y el Código Penal establecen penas severas e incluso la clausura de los establecimientos donde se detecte la venta de bebidas alcohólicas a menores de edad, el restaurante Los Tucanes que por las noches de convierte en la “Cueva del Bohemio”, no fue cerrado este domingo por las autoridades municipales pese a la detención de su propietaria por parte de la Policía Naval al ubicar en ese sitio a personas con edad inferior a los 18 años, embriagándose.
En un operativo realizado el pasado domingo, la Policía Naval detuvo a María Josefa Jácome Barroso, mejor conocida como doña Yoshi, administradora y propietaria del restaurante-bar, tras ubicar a cinco adolescentes de entre 16 y 17 años de edad embriagándose, pero además a quienes acompañaban a éstos últimos que son Manuel y Miguel González Nolasco, Diego Aquino Cruz, María Guadalupe González López y Ana Rocío Carmona González.
A 24 horas de ese hecho, el restaurante-bar continúa operando y según sus empleados, la dueña no fue remitida a ninguna autoridad ministerial, menos a las personas que acompañaban a los menores.
La reforma a la Ley de Salud establece la detención del dueño de la negociación, una multa de hasta 600 salarios mínimos y la clausura del lugar, pero los cambios al Código Penal establecen una penalidad de 6 a 12 años de prisión ya que es un delito considerado grave.
Esta reforma entró en vigor desde el mes pasado una vez que el Congreso la aprobó.